La magia, una máquina de ilusiones para niños

La magia, para muchos adultos pero sobre todo para los niños, es una máquina de ilusiones que les crea un brillo muy especial.

El asombro y la sorpresa de ver desaparecer un objeto, les maravilla aunque sepan que se trate de un truco.

Esta máquina de ilusiones, es un estímulo que sirve para conservar el sueño de que todo es posible. Aviva la imaginación, creando mundos sin imposibles.

¿Cuándo empiezan a dudar que es posible?

A partir de los cuatro años, es cuando los niños comienzan a sospechar que puede haber algún truco tras la magia. Aún así, los espectáculos de magia les harán resurgir esa chispa de maravilla, y volverán a creer en imposibles.

Enseñando a los niños trucos de magia

Vamos a sugeriros algunos trucos de magia que podéis enseñar a los niños, para que ellos sean los magos por una vez. Esto les hará tener creatividad, confianza y memoria para poder ejecutarlos.

• Truco del vaso flotante: En este truco harán volar un vaso de plástico. Para ello, haremos un agujero en la parte de atrás del vaso para el niño pueda introducir uno de sus dedos, y así servirá de sujeción.

• Caramelos que desaparecen. Para este truco hace falta un par de platos de plástico y varios caramelos. Deben de ser caramelos con una superficie lisa porque para que desaparezcan vamos a pegarlos con cinta de doble cara a uno de los platos. Al estar pegados a uno de los platos, si lo giráis no los veréis porque estarán boca abajo.

• Vaso tragamonedas. El truco está en colocar una tapa circular de cartulina del mismo color que la que utilizaremos como «mantel» de apoyo será exactamente del mismo color. Ya imaginas lo que hay que hacer. Es simplemente tapar el vaso con una tela una vez deposites la moneda en la cartulina de apoyo, y pasando el vaso por encima se tapará la moneda…por arte de magia.

Te sugerimos que por internet en youtube busques más trucos sencillos para que los niños sean los magos esta vez. Verás que les encantará y además será una ocasión de pasar una tarde fantástica o una manera de sorprender al resto de la familia.